[Temuco] En oficinas de la Diócesis San José de Temuco, se reunieron La Directiva del Sindicato de Profesionales de UCT junto al Obispo Monseñor Héctor Vargas.  La directiva expuso ante Su Excelencia un tema que tiene relación con el actual “Proyecto de Ley” que busca modificar el artículo 304 del Código del Trabajo, y que afecta la negociación colectiva de los sindicatos pertenecientes a instituciones que reciben aportes estatales.  Esta situación tiene muy expectantes a los trabajadores de la Universidad Católica de Temuco, específicamente.

El artículo 304 exhibe que “no existirá negociación colectiva en las empresas o instituciones públicas o privadas cuyos presupuestos en cualquiera de los dos últimos años calendarios hayan sido financiados en más de un 50% por el Estado”.

Dada la condición de autoridad que Monseñor Héctor Vargas posee en el ámbito de la educación, en su calidad de Gran Canciller, no es menor el apoyo que él pueda brindar en esta iniciativa, el que no busca más que poner equidad social en el ámbito del trabajo.

Ante este panorama Monseñor Héctor Vargas comentó que “estoy dispuesto a informarme más de este caso. Y además estoy dispuesto a asistir a cualquier actividad en la que el Sindicato me invite”, expuso el Gran Canciller de la Universidad Católica de Temuco.

Dejando en claro que su postura es siempre abierta al diálogo, a la participación, y a la sana comunión en la Universidad.

A su vez la presidenta del Sindicato de Profesionales UCT, Grela Arriagada, comentó que “la reunión con nuestro Obispo Monseñor Héctor Vargas fue muy agradable, nos recibió en su lugar de trabajo, y cómo autoridad regional escuchó cada uno de nuestros temas, empatizó con nosotros, y por sobre todas las cosas nos invitó a reflexionar y tener fe en que lograremos buenos resultados”.

Esta reunión buscó la colaboración mutua, entre el Gran Canciller y el directorio del Sindicato de Profesionales UCT, para alcanzar un diálogo fraterno entre las organizaciones sindicales y las autoridades políticas nacionales. Haciendo de esta modificación legal una meta común, identificados por el sello católico.